Sobre Universidad de Oviedo
Área de Electroanálisis del Grupo de Espectrometría y Electroquímica Bionanoanalíticas (E2BNA) del Departamento de Química Física y Analítica
Aportación de la Universidad de Oviedo al proyecto
La Universidad de Oviedo es el principal motor de investigación en Asturias, desarrollando el 80% de la I+D+i autonómica, con 173 grupos de investigación acreditados. El Área de Electroanálisis del Grupo de Espectrometría y Electroquímica Bionanoanalíticas (E2BNA) del Departamento de Química Física y Analítica tiene dentro de sus objetivos el desarrollo de metodologías de análisis descentralizado, de forma que se pueda obtener información (bio)química de calidad en el punto donde se requiere. Para ello, deberían de tomarse muestras de forma mínimamente invasiva, realizando los análisis de forma rápida y bajo coste, lo que en este caso se hace empleando técnicas electroanalíticas.
En este contexto, la contribución a este proyecto, centrado en la mejora de la calidad de vida de personas con discapacidades que afectan a la comunicación y/o la interacción social (personas con TEA en el proyecto piloto), se basa en la obtención de información bioquímica sobre su respuesta frente a situaciones de estrés. El cambio en la rutina, las dificultades sensoriales, las situaciones sociales inciertas e impredecibles pueden ser causas de estrés que afecten negativamente a su desarrollo social y emocional.
Así, y en colaboración con la asociación Adansi, se han tomado muestras de saliva de personas con TEA en momentos de estrés, y se han determinado dos biomarcadores que suelen encontrarse elevados en estas situaciones: el cortisol (hormona glucocorticoide segregada por las glándulas suprarrenales) y la alfa-amilasa (enzima segregada por las glándulas salivales para la digestión de los carbohidratos). Con ello, se pretende avanzar en el desarrollo de una metodología de análisis y el diseño de dispositivos de medida que permitan su uso en consultas médicas u otras localizaciones de interés. La información acerca de estos biomarcadores permitiría tomar decisiones que mejoren la calidad de vida de las personas con TEA. Al ser el estrés una situación que afecta a muchos colectivos, frente a muchas circunstancias, podría tener muchas aplicaciones (salud mental, mejora de rendimiento…). También podría ampliarse a la determinación de biomarcadores de interés, relacionados con otros desórdenes y enfermedades.